Hoy no recordamos el día de la mujer como fecha de celebración, pero sí quiero traer a memoria la valentía con que las mujeres enfrentamos los desafíos de la vida.
Sabemos que a través de la historia las mujeres tenían muy poca participación en la sociedad o simplemente no la tenían; época muy marcada por la discriminación, donde se las consideraba incapaces de ocupar cargos distintos a las tareas del hogar. Debido a ello fueron muy vulnerables a distintos tipos de abusos, simplemente no se las escuchaba. Con el correr de los años esto fue cambiando hasta llegar a donde estamos ahora: una sociedad con adelantos tecnológicos e innovaciones industriales, pero que en muchos países aún no se reconocen los derechos de la mujer como ser humano, esto en casos extremos, como en el continente africano y distintas partes del mundo.
A pesar de que en la sociedad actual hubieron grandes logros que dignifican a la mujer, y éstos las ubican en una mejor posición respecto al pasado,
aún están muy arraigadas en las culturas patriarcales el hecho de que algunas tareas sólo deben ocupar las mujeres, y como sólo ellas deben ocuparlas, entonces deben encargarse de muchas cosas a la vez, obligándolas a llegar a un punto de mucho stress.
En el ámbito profesional las mujeres sufren tantas injusticias como ser la diferencia de salarios y condiciones de ascenso. La sociedad también nos impone que todo debemos lograrlo a la vez y cumplir ciertos estándares de “belleza” para ser aceptadas. Los medios contribuyen para ello, generando inseguridad, baja autoestima y pensamientos de que valemos como mujer sólo por lo que tenemos, no así por lo que somos.
Por eso debemos recordar que somos valiosas y apreciarnos realmente; que cada una es única y por sobre todo que somos hijas amadas de Dios, cambiando esos pensamientos de identidad con la que la sociedad nos quiere confundir y distraer. Perseguir nuestros sueños a pesar de los obstáculos que se nos van a ir presentando porque sí podemos.
¡Nosotras podemos y valemos!
Escrito por Gisselle Blanco – Estudiante del primer curso Administración de Empresas.